Australia pedirá a la UE el envío de 3,8 millones de dosis de AstraZeneca
SIDNEY, AUSTRALIA.- El primer ministro de Australia, Scott Morrison, dijo este miércoles que pedirá a la Unión Europea (UE) y a la compañía farmacéutica AstraZeneca que se concrete el envío a su país de las 3,8 millones de dosis de vacunas contra la covid-19 adquiridas en septiembre, de las cuales aún faltan por llegar 3,1 millones.
“Si realmente la posición de la Unión Europea es que les parece bien que se concedan estas licencias de exportación y que 3,8 millones de dosis lleguen a Australia, entonces les animamos a que lo hagan”, dijo Morrison a periodistas en Camberra, después de que la UE asegurara que no bloquea el envío de las vacunas.
El mandatario agregó que su gobierno también contactará con AstraZeneca “para buscar que las licencias de exportación por el monto total de las dosis, los 3,8 millones, sean otorgadas a Australia”, de las cuales ya han llegado 700.000 dosis al país oceánico.
Australia se ha comprometido a enviar el primer millón de las vacunas que aún faltan por llegar al vecino Papúa Nueva Guinea, que enfrenta una grave crisis sanitaria por la covid-19.
Morrison dijo en la víspera que Australia no ha recibido aún 3,1 millones de dosis que esperaba de la vacuna de AstraZeneca, lo que ha causado que se administren menos del 25 % del objetivo de 4 millones que se había marcado al final de marzo, que después modificó hasta finales de abril.
Sus declaraciones motivaron que el portavoz de la UE, Eric Mamer, aclarara el martes a la prensa que el bloque europeo solamente ha denegado el envío de 250.000 dosis de la vacuna AstraZeneca desde Italia a Australia el mes pasado.
“No podemos confirmar ninguna decisión nueva para bloquear las exportaciones de vacunas a Australia u a otro país”, aclaró el portavoz de la UE, que afronta una crisis de escasez de vacunas AstraZeneca debido a que la farmacéutica no da abasto con la demanda.
Australia había asegurado 53,8 millones de dosis de AstraZeneca, de las cuales unos 3,8 millones debían entregarse a principios de 2021, mientras que las otras 50 millones serán producidas localmente por el laboratorio CSL como parte de la campaña nacional de vacunación que comenzó el 21 de febrero con la vacuna de Pfizer.
Las demoras en la vacunación también han causado enfrentamientos entre el Gobierno de Morrison y el de los estados y territorios australianos, después de que el ministro de Agricultura, David Littleproud, acusara a estas jurisdicciones de apilarlas en lugar de distribuirlas.
Australia, que mantiene sus fronteras internacionales cerradas desde marzo de 2020, acumula desde el inicio de la pandemia unos 29.300 casos de covid-19, entre ellos 909 muertos, la mayoría provocados por la segunda ola a raíz de los fallos de seguridad a mediados del año pasado en los centros de cuarentena para viajeros internacionales.
EFE